Ignoro si te quiero como antes
o si es por rutina que estoy contigo...
Porque no soy de pasos vacilantes
mas al mínimo intento de alejarme,
mover mis pies de plomo no consigo.
El sol realza
el rubor del ocaso
con su sonrisa.
Me encanta fantasear en libertad
porque vuelo y examino mis andadas...
Y mi niñez en donde la soledad
sólo latía en historias inventadas.
Vivir pretendiendo mil ilusiones
hasta el fin de su desembocadura,
en el inmenso mar de los posibles,
es luchar y sonreírle a la Vida.
Huyó con el sol al ocaso
su sonrisa de melodía.
No pudo retar al fracaso
sin el guiño de su alegría.
El aire mecía una hoja en blanco.
Hasta ayer sólo él la acariciaba;
hoy la consienten versos furtivos,
las líneas de amor que anhelaba.